EL Equilibrio Entre el Trabajo y la Familia |
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HACIENDO |
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No importa cual sea su empleo, el ritmo de su trabajo es considerablemente distinto y probablemente más intenso que el de su hogar. Al llegar a su hogar, todavía pensando en su trabajo, y sin poder olvidarse de los eventos del día, puede causarle un tenso conflicto entre su trabajo y su familia.
Para cambiar hábitos contra productivos que puedan influenciar el equilibrio entre trabajo/familia, pregúntese lo siguiente:
Dónde puedo comenzar a cambiar las cosas que tienen un impacto negativo en el cumplimiento de mis obligaciones hacia mi
trabajo/familia?
Que es lo que debo hacer para trazar claramente una línea entre el trabajo y la
familia?
Que costumbres o hábitos tengo que cambiar?
Cómo puedo dejar los problemas del trabajo en el trabajo?
UNAS SUGERENCIAS PARA LA TRANSICIÓN
Antes de Irse de su Trabajo
Dedique los últimos minutos en su trabajo a las tareas más fáciles y de menos presión. Haga ciertas llamadas por teléfono, termine cualquier tarea que tenga por hacer, organice sus planes para el día siguiente.
Libre su mente de cualquier asunto pendiente, escribiéndolo en un papel. Porque si no, cuando le diga a sus hijos algo como, "No me olvidare - lo tendré en mente para mañana," seguramente que su mente hará eso mismo - y lo tendrá distraído una vez que este en su hogar.
Sea realista en cuanto al trabajo que lleve a su casa. Pregúntese, "Como puedo emplear mi tiempo mejor esta noche - para mí mismo y para mi familia? Puedo posponer o delegar este trabajo? Puedo verdaderamente terminarlo o me pondré distraído y frustrado porque no lo puedo terminar todo?"
Calmándose en su Hogar
Aparte un tiempo con los miembros de su familia para permitirse un "tiempo para rejuvenecerse" al llegar a su hogar. Use este breve intermedio para organizar sus pensamientos, revisar el correo, hacer ejercicios, ir a caminar, cambiarse de ropa, tomar una ducha o un baño caliente. o tomarse una taza de té para
relajarse.
Posponga el conversar sobre su día de trabajo al minuto de llegar a su casa. "Como te fue hoy?" se parece mucho a la pregunta "Como estas?" Su respuesta inicial debe ser breve. Desahogando todos los problemas del día cuando Usted llegue a su casa puede fácilmente provocar discusiones fatigosas que pueden durar hasta tarde en la
noche.
Si necesita conversar con su pareja sobre sus asuntos o problemas en el trabajo, pónganse de acuerdo para sentarse juntos a una hora determinada y conversar sobre los acontecimientos del día. Decida junto con su pareja cuanto tiempo quieren dedicarle a la conversación relacionada con los asuntos del trabajo, en vez de pasar el tiempo en otra cosa juntos, tal como compartir unos momentos relajados o en otros intereses
mutuos.
Disfrute comiendo una pequeña merienda al llegar a su hogar para recobrar energías. Esto también disminuirá la oportunidad de comenzar discusiones inútiles iniciadas simplemente por la tensión del hambre.